Bolds´ Sanctuary

POLVO, SUDOR Y SANGRE

Pufff... pues hoy ha sido un dia "deportivo", de esos que uno no hace más que acordarse del sofa, el aire acondicionado y los refrescos helados. Por la mañana la tipica carrerita y ahora desde las 6 hasta las 9 dandole a la raqueta... no aguanto este ritmo, pero al menos me hace olvidarme de Ella (que es la razon principal por la que lo estoy haciendo).

Hoy he revivido una sensacion poderosa, solo lo he conseguido 6 o 7 veces del medio centenar de dias que llevo haciendo deporte. El cuerpo se tensa, no puedes pensar en nada más que en tomar aire e intentar ver algo... los pulmones queman y el sudor escuece en los ojos. El sabor metalico de la sangre impregna tu gargante, el corazon está desbocado, tus musculos estan a punto del colapso... pero da igual, no hay pensamientos, solo intentar respirar.

Ha sido mientras esperaba el saque de un hombre que nos ha ofrecido un partido a dobles (estabamos 3 y se nos ha acercado), los dos puntos anteriores los habiamos perdido, ambos por el cansansio (uno cada uno). Me tocaba a mi esperar el saque, todo a camara lenta, en mi mente se abria paso el pensamiento de que debia dar a la pelota... luego todo es mecanico, el cuerpo obedece instintivamente, las piernas se impulsan y corres sin darte cuenta, casi llegas, un ultimo impulso, te mantienes en el aire y piensas que estas muy bajo, el brazo sale disparado y golpeas milagrosamente la pelota, luego caes al suelo, ruedas y te levantas rapidamente, los oponentes son muy buenos, pero descubres con placer que el golpe (de coña) ha entrado muy pegado a la pared y la raqueta del contrario golpea el muro sin poder dar a la pelota. Punto para nosotros.

Te alzas en toda tu altura, los pantalones, antes azules, ahora tienen varias trazas de polvo, el sudor corre por tu cuello y el sabor de la sangre te recuerda que sigues bombeando sangre dificultosamente. Hemos perdido el partido, pero he ganado varios minutos de paz donde solo me importaba respirar de nuevo. El premio, una cervecita bien fria (cuando estaba con Ella no podia probarla de amarga que me parecia, ahora es casi un ritual) y la ducha que me voy a dar ahora mismo.