4 de Junio 2005

Declaraciones y lealtades

Cuando anoche decidí escribir este post y la protagonista me dio su permiso me surgió la eterna duda como bloguero. ¿Cuento las cosas de forma sencilla, directa y clara o me lo curro un poco más y visto la situación con enrevesadas palabras y heroicas (o desgarradoras) descripciones de sentimientos?

Esa duda echó a perder la hora de estudio que tenía prevista... pero me dio igual. Estrés estaba asustado, ella le había puesto contra las cuerdas y Corazón estaba emocionado. Mentiría si dijera que para mi esto es nuevo o poco común, no sería admisible rasgarme las vestiduras porque no me suele pasar... pero ayer fue algo diferente...

Como escritor (novel y malo :)), siempre he potenciado las declaraciones de lealtad incondicional, momentos llenos de tensión, habituales entre amantes. ¿Que mejor escena que la de las personas prometiéndose compromisos, expectativas comunes, nuevos proyectos conjuntos, momentos de pasional intimidad y una, casi interminable, lista de actividades de pareja?

Pues como lector veterano de cientos de historias diferentes, siempre le encontraba un gusto especial a aquellas pocas en las que primaba la amistad, no esa llena de sonrisas y fuegos artificiales, si no la callada, sobria y profunda. Recuerdo con especial cariño la escena en la que un guerrero de una tribu nómada, fundamentalmente cerrada, llamaba “amigo” a un caballero con el que me sentía identificado… un acto con contados precedentes y que, explicaba el libro, era el mejor regalo que creían poder hacer aquellos recios y callados cazadores de las llanuras.

La protagonista de este post no es la que me trata con más cariño o con la que más a menudo hablo… ni siquiera es a la que más cosas he contado. Pero raro es el día en el que he estado mal y ella no ha dejado su particular aportación para lograr mi sonrisa o mi suspiro de alivio. Creo que a veces nos entendemos mejor que nosotros mismos (aunque ella no lo crea :)).

Hubo un tiempo en el que tuve que encerrar en una urna de cristal lo que por ella sentía para no enrarecer una prometedora amistad. Pero los deseos imposibles, los celos y el miedo se han evaporado. El cristal se ha roto. Mejor, ya no hace falta… el respeto, la lealtad y la admiración no pueden estar encerrados. La amistad no cree en las barreras, ni siquiera en aquellas transparentes.


Escrito por Träne (trane1985@gmail.com) a las 4 de Junio 2005 a las 04:03 PM
Comentarios

No sé si serán los exámenes, la primavera que ya es casi verano o qué, pero estás escribiendo mejor que nunca :) (y no soy la primera que lo dice)

En este mundo nuestro que va cambiando continuamente, la amistad es uno de los mayores tesoros que tenemos. Me alegro de que ya no haya urna de cristal :)

Ahora es cuando deberíamos brindar por la amistad verdadera (o algo así... que tú eres el maestro con estos temas :P)

Un abrazo, Trane :) (mmm, quedaría mejor con tu nombre...)

Escrito por sola a las 4 de Junio 2005 a las 05:39 PM

Como parece que los fines de semana son más flojitos y tengo un ratejo largo... te contesto frase a frase :P.

"No sé si serán los exámenes, la primavera que ya es casi verano o qué, pero estás escribiendo mejor que nunca :) (y no soy la primera que lo dice)" :D, pues será que me veis con mejores ojos o que estoy desplegando mi capacidad al máximo a ver si así consigo atraer a esa madrileña perfecta :P.

"En este mundo nuestro que va cambiando continuamente, la amistad es uno de los mayores tesoros que tenemos. Me alegro de que ya no haya urna de cristal :)" Sipes, anda que no han cambiado cosas en un año... y otras parecen mantenerse inmoviles... seguras :). Hay veces que el riesgo es tanto, que es mejor guardar la urna... otras simplemente se rompen :).

"Ahora es cuando deberíamos brindar por la amistad verdadera (o algo así... que tú eres el maestro con estos temas :P)" Más que amistad verdadera, ¿te parece mal si lo califico de amistad profunda?... Brindemos pues ;).

"Un abrazo, Trane :) (mmm, quedaría mejor con tu nombre...)" Aqui quería llegar yo :D. ¿te hace un pacto de amigos? Cuando nos dirijamos el uno al otro directamente, podiamos usar nuestro nombre de pila... si nos referimos el uno al otro a terceros (sipes, lo hago :P) podemos usar el nick. De todas formas, sabes que no hay ningun problema en llamarme Mario :). Y como no, un abrazo para ti... princesa!! :P.

Escrito por Träne a las 4 de Junio 2005 a las 10:56 PM
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