31 de Marzo 2006

Lágrima de dragón

Un rayo de luz atravesó su pupila, obligándole a guiñar los ojos. Un leve respingo de dolor. Varios parpadeos rápidos y, al fin, acostumbrarse a la claridad.

¿Luz? En su cueva no había de eso. No tenía ventanas, ni claraboyas… si hasta la entrada era una húmeda grieta llena de recovecos por donde se perdía el sol sin llegar al final de la primera cámara. Estaba acostumbrándose a la perpetua oscuridad, un cómodo refugio donde la necesidad de comer o dormir desaparecían… ni siquiera estaba la impertinente necesidad de pensar.

Ahora había cambiado. Algo se había movido. Se desperezó. Su sinuoso cuerpo rozaba constantemente contra las paredes, emitiendo un rasposo sonido casi metálico al rozar las escamas contra las piedras que, hasta ahora, le habían servido de refugio. Avanzó con seguridad hacia la salida, recordando con cierto pesar, el camino que debía seguir. Aunque sabía que podía pasar, nunca había considerado en serio la idea de regresar, le gustaba más el cálido refugio que ahora abandonaba sin remedio.

Una ráfaga de aire le golpeó. Se tambaleó a punto de derrumbarse, no por la fuerza del viento, apenas una brisa, si no por la sorpresa. Estaba cerca de la superficie. Más de aquella hiriente luz.

Un desprendimiento. La poderosa montaña no tiene misericordia de los que en sus entrañas habitan. Había transformado en un luminoso acantilado lo que hasta ahora había sido la lóbrega y acogedora entrada a su cueva.

Con un rechinar de articulaciones saltó al vacío. Calambres en sus articulaciones al reaccionar, cortando el viento en caída libre. Adrenalina empujando desde su pecho por subir (más bien bajar, pues se ha lanzado de cabeza) por sus hombros y brazos.

Un seco crujido, otro leve respingo de dolor y un despliegue de sus dormidas alas a pocos metros del suelo, cubriendo una inmensa franja de tierra con su enorme y poderosa figura. Aprovechando una corriente de aire bate con fuerza sus membranosos apéndices y deja que la furia y el orgullo de los dragones inunde su recién despierto cuerpo.

Sobrevuela un castillo y un hermoso lago. Planea a su alrededor combatiendo contra las diferentes corrientes de viento, disfrutando de su fuerza. De pronto se fija en una solitaria figura. Deja de aletear y se desliza por el cielo para acercarse. Un breve destello de luz le confirma que es un caballero con su armadura pulida, con la rodilla clavada en el suelo y la cabeza inclinada sobre el lago. Agua helada a pesar de la agradable temperatura.

Una inspección más diligente le hace observar algo que no está al alcance más que de unos pocos. Alrededor del humano hay signos de una batalla que trasciende a lo físico. Puede ver los ajados cuerpos de “Razón”, “Cordura”, “Templaza” y “Miedo”. Más recientes, los cadáveres todavía calientes, “Pasión”, “Intrepidez”, “Seguridad” y “Cariño”. Tan sólo un desconcertado “Instinto” ha podido quedar en pie.

Dragón, que a pesar de ser uno de los seres más poderosos de “su” mundo, no es capaz de contener una ardiente lágrima ante ese dantesco espectáculo. Esta desciende haciendo finas espirales en el aire, ajena al dolor que transporta. Acudiendo a la llamada de la tierra que la pide su compañía.

La salada gota estalla en una gris hecatombe sobre la nuca del desdichado caballero. Y dos nuevos cuerpos surgen de la nada. Dragón sonríe con una tristeza infinita, aguantando un pesar intenso del que sabe que tiene que suceder y que lo acepta como natural. Una breve luz de esperanza brilla en su mirada, “Instinto” se prepara para el nuevo combate, está seguro que vencerá... a pesar de todo.

Susurra los nombres de aquellos a quienes ha despertado con su lágrima… “Dolor” y “Tristeza”…

Escrito por Träne (trane1985@gmail.com) a las 31 de Marzo 2006 a las 03:50 PM
Comentarios

Esto me recuerda algo que tengo pendiente desde hace mucho tiempo, una lágrima de dragón, mucho significado y muy poco tiempo, pero una deuda es una deuda y una promesa es una promesa, te lo debo y lo cumpliré muy pronto.

Muy bonito Träne, me ha encantado, enhorabuena.

Un beso.

Escrito por bamby a las 1 de Abril 2006 a las 08:54 PM

Gracias :). POr cierto, hay promesas que prescriben :P, no te preocupes por esa. Entiendo tu carencia de tiempo.

Un beso bamby

Escrito por Träne a las 5 de Abril 2006 a las 12:47 PM
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