Y el mundo a mi alrededor se torna oscuro y seco. Pequeño destellos de luz se abren camino en mi embotada mente. Cuando abro los ojos me veo en mitad de un desierto con un extraño halo rojizo, como si tuviera un paño de fina tela del encarnado color frente a los ojos. Los gritos de los agonizantes suenan a mi alrededor, doy una vuelta sobre mi mismo y compruebo que ya no es mi oscura cueva, que la batalla ha comenzado y se han acabado las pruebas y los ensayos.
Nada más cerciorarme de que la batalla ha comenzado escucho unos murmullos apenas audibles, poco despues siento un impacto en el pecho que me hace rodar por el suelo y quedar cubierto de ese rojizo polvo que vuela a su antojo por todo el entorno. Siento la boca seca y los ojos llorosos. Haciendo un esfuerzo que mis musculos se empeñan en lamentar con gruñidos y quejas me pongo en pie y me preparo. Visualizo a quien me ha atacado. Supongo que es más facil tener a alguien contra quien luchar y casi me alegro de que sea un ente físico.
Sus tentaculos se extienden por la tierra, viscosos y ondulantes se hunden en la fina arena para volver a salir, en una especie de juego que a nadie más que a sí mismo le parece divertido. Más grande que cualquier pesadilla que haya conseguido atenazarme en mucho tiempo, con poder emanando por cada uno de sus poros. Empiezo a conjurar mis propios hechizos, murmuro palabras repetidas en largas jornadas de estudio, me esfuerzo por darles el tono adecuado, el quiebro de voz necesario, el impetu requerido, y consigo conjurar un crepitante rayo de luz que atraviesa el seco ambiente para clavarse en la masa palpitante del ser al que me enfrento. Gruñe de dolor y me permito unos segundos de extasis por el trabajo bien hecho, poco tiempo pues ahora comienza a murmurar de nuevo palabras que están destinadas a abatirme. Por más que intento buscar su boca entre los pliegues de humeda carne no puedo encontrar el origen de ese sonido antiguo y discordante en el que se transforma la lengua de la magia al pronunciarlo tan aberrante monstruo.
Veo con creciente desconcierto que ha imbocado una pequeña rata. No me hará falta valerme de la magia para defenderme de su ataque. Me despreocupo del pequeño animal que se acerca a mi corriendo, entono un suave cantico, una luz me rodea, y pequeñas chispas salen de mis dedos extendidos para transformase en un poderoso guerrero cubierto por una plateada armadura, embiste al ser lleno de tentaculos aplastando por el camino al insignificante roedor, seguro de mi victoria ensayo una triunfal sonrisa. Pronto se borra de mi faz, reconozco el contrahechizo, mi enemigo está invocando un nuevo ser, mucho más fiero que en su anterior intentona... Un colosal dragon se abre camino aleteando entre pliegues de oscuridad para irrumpir en nuestro plano, con sus poderosas alas desplegadas y oscureciendo el campo de batalla se avalanza sobre mi caballero, que se debate inutilmente entre sus zarpas.
El combate dura horas, y ahora veo exhausto como mi enemigo escapa. No sé si porque he vencido esta batalla o simplemente porque se ha aburrido... deberé esperar y descansar hasta la siguiente lid. Una incomoda migraña se ha plantado en mi cabeza y debo sentarme para poder respirar un aire que cada vez me parece más seco y caliente, pero que no deja de ser un agradable cambio para mis vacios pulmones.
Escrito por Träne (trane1985@gmail.com) a las 1 de Septiembre 2006 a las 05:41 PMDefinitivamente esas batallas tan prolongadas son agotadoras, pero como el guerrero de ese relato se ha preparado bastante, tendrá una victoria en esta y en las próximas contiendas.
Que manera de transformar las cosas, me dejas sorprendida.
Un abrazo grande.
Escrito por MINERVA a las 1 de Septiembre 2006 a las 08:10 PM"Nunca dudes en cambiar de direccion si el camino se acabóooooooo
Nada hay bajo el sol, que no tenga solución,
nunca una noche venció a un amanecer... "
Si, es una letra de la canción TÚ MISMO.
Perdona, me costó encontrar el significado de la metáfora, pero ahora es evidente, y en tu caso, sé que superarás cualquier muro que se te presente y que esa tenacidad te llevará a donde quieres ir.
Qué espesa estoy, cómo no lo vi? ..."una coma fuera de sitio..." son tus exámenes.
Bueno, pues ya veo que la primera batalla, digo exámen, no ha ido mal del todo no?
Ya sabes que batalla a batalla se ganan las guerras, mucha suerte, la preparación en tu cueva te reportará estupendos resultados, te lo mereces, suerte.
Un beso.
Escrito por bamby a las 2 de Septiembre 2006 a las 11:48 AMPor fin me pongo a escribir... :)
Minerva: Escribir no es tan dificil, todo el mundo vive situaciones cotidianas que se pueden transformar en relatos de menor o mayor interes. Simplemente debes cerrar los ojos y dejar que sea el niño que todos tenemos el que se lo imagine, como cuando se es pequeño y se juega a cualquier cosa con la simple imaginacion.
Un abrazo
Bamby: jajajaja, esa cancion. En ese caso me referia a los examenes (tranquila, es normal que se te escapara el significado), pero las contestaciones las hacia pensando en un plano mas general, no solo en este en particular. En fin, espero que me reporte victorias si quiero seguir luchando :).
Un besazo
Escrito por Träne a las 10 de Septiembre 2006 a las 01:05 PM