El agua caliente empieza a gotear. Finos hilos de ocre sangre diluida parten de las heridas más recientes, limpiando en su fluir cualquier resto en la superficie. Pronto el atronador rugido de la catarata te ensordece y ciega, el vapor forma densos bancos de blanca materia, paredes de fugaz agua que te protegen lentamente.
Los musculos vibran inquietos bajo la piel, cansados, doloridos, nerviosos y activos. Como animales enjaulados. El acre sabor del sudor, de la derrota y de la victoria, desaparece lentamente, como si no tuviera prisa por irse.
Cuando el relajante fluir de la catarata se apaga, un cálido brebaje recorre tu garganta. Hijo de los primeros brotes, blancos todavía, de unos arbustos de asiaticas montañas y de rojos frutos de los bosques menos maltratados. Reconforta el calor que siente el cuerpo, apaciguando a los musculos y expulsando impurezas.
Si todo fuera un poco más facil...
Escrito por Träne (trane1985@gmail.com) a las 27 de Mayo 2007 a las 01:39 PMCalma Träne, calma...
El tiempo pone todo en su sitio.
Besos mil :)
Escrito por Lua a las 27 de Mayo 2007 a las 08:13 PMLúa acierta,el tiempo lo pone todo en su lugar.
Y a mi ver, aunque a veces deseemos que las cosas sean más fáciles(muchas de ellas con motivo),cuando las logramos no tienen el mismo sabor a triunfo que cuando las peleamos de verdad.
Un abrazo!
Jen
Lua: El tiempo pone todo en su sitio... sí, es lo unico que da fuerzas. Pero hay veces que el tiempo tarda mucho y nos toca esperar al filo de una gota de agua (poca seguridad :)).
Besos!
Jen: Pues que no se diga que hay cosas que no peleo... porque tengo un par de batallas abiertas que me consumen buena parte de mi energia. Espero que el tiempo se canse rapido y venga ya, soy un poco impaciente :).
un abrazo :)
Escrito por Träne a las 29 de Mayo 2007 a las 01:10 PM