Ayer por la noche llegué de Irlanda, y el post de hoy iba a ser distinto, estaba ya pensado, el tema iba a ser la despedida emotiva y el placer de caminar, esta mañana, por un centro comercial donde poder oir a gente hablar en mi propio idioma.
Pero todos los mensajes triunfalistas han quedado sepultados bajo el peso de una triste noticia que me ha golpeado con fuerza. Nuestro gato, de apenas un año y medio, sufre una extraña enfermedad que los veterinarios son incapaces de diagnosticar, y cuya única solución ha sido atiborrarle de corticoides un mes. Todo pareció mejorar, volvió a ser casi el de siempre, pero un mes más tarde (este domingo) recayó con fuerza sin poder usar las patas traseras, no comía ni bebía más que lo que le dábamos pacientemente en la boca (y a veces se resistía para no probar bocado en todo el día).
Me fui a Irlanda cuando empezaba a mejorar, y vine poco después de la recaída. Esto está siendo un poco más duro de lo que había imaginado.
- Lo más humano, para Neo y para vosotros, es eutanasiarle.
Y estaba yo con mi padre en el veterinario cuando nos ha dicho eso y hemos asentido sin poder hablar casi. Nos han hecho pasar a otra sala donde le han puesto una inyección para dormirle, y por última vez nos ha mirado mientras caía poco a poco en los brazos de la anestesia.
Ayer lloré al despedirme de ciertas personas de Irlanda, sobretodo de una que quizás no vea al año que viene por funestos reveses del destino. Y de otras que, buscando una vida mejor, partirán para no volver. Y hoy he vuelto a llorar, de esa forma en la que uno intenta contenerse, y se muerde el labio, y los ojos enrojecidos expulsan una a una gruesas lágrimas que intentas disimular, y la voz se va, e inspiras una y otra vez para tomar aire y tragarte las putas lágrimas. Hemos salido de la clínica sin Neo, ya dormido y esperando una indolora inyección, y nos hemos encaminado hacia el coche, torpes, mi padre y yo, ambos mordiéndonos los labios y sin voz, por unos minutos.
Se que es un gato, un animal, nada más que eso. Pero su pérdida me duele intensamente. En mis ausencias en Irlanda (el año pasado y este), Neo dormía en mi cama, esperando mi regreso en las noches de invierno, saltaba a mi lado, y se acurrucaba en mis pies para combatir el frio. Me despertaba a lametazos cuando sonaba el despertador, y acudía a la puerta siempre que alguien de la familia entraba.
Hace tiempo leí un poema a una mascota fallecida que decía algo parecido a esto: espero que ahora camines por los tejados del cielo. Por cursi que me pareciera ese dia, por incomprensible que me pareciera en su momento yo mismo estoy escribiendo un post de despedida a mi gato. Creo que el problema es que normalmente veo un camino por el que seguir la lucha; si suspendes, estudias para aprobar un par de meses más tarde; si te echan del trabajo, te rompes los cuernos para encontrar uno nuevo; Si notas el estrés de la responsabilidad, piensas que todo pasa y que mañana será otro dia Pero ahora no se me ocurre nada por lo que seguir ese camino, la muerte se impone sin contemplaciones, y a cada uno le duele lo suyo, y solo queda llorar y a veces dedicar unas palabras a quien se ha ido, aunque sea una bola de pelos.
Te voy a echar de menos.
En 6 horas me levanto, en 7 y media tendría que estar en el aeropuerto, en 10 horas y media sale mi vuelo a Irlanda.
Llegaré a otro país poco despues del medio dia de mañana. Y eso supondrá despedirme de España, de lo que aquí me ata, durante un mes, me despediré de este blog, de la universidad, de mis amigos... diría que del idioma, pero allí los estudiantes a los que monitoreo se niegan a desterrar su lengua materna.
Tendré que estar pendiente de 63 personitas, repartido el trabajo entre media docena de responsables (siempre faltarán manos, porque la mitad de la media docena no son responsables... y esto me recuerda al frikie-discurso de Bilbo el dia de su cumpleaños, en el Señor de los Anillos).
Mañana dormiré en una cama que no es la mia, en la casa de una familia que no es la mia, con gente soñando en el piso de arriba en otro idioma.
No hay miedo, si acaso algo de nerviosismo hasta llegar al aeropuerto. Y quizás algo de reparo hasta que saque a los chavales del aeropuerto de Dublin, parece facil, soy el responsable desde que cogemos las maletas hasta que llegamos a Newbridge... solo un trayecto de una hora en un par de autobuses privados... pero nunca se sabe con 63 niños.
Cambiaré los 35 grados por 15 de temperatura. Y quizás eso sea lo mejor... hoy he sentido el calor como una amante fogosa que me besaba los labios apasionadamente... pero sin que llegara la parte buena de verdad.
En fin, en 29 dias nos vemos. Sed buenos y buenas. Y sobretodo, sed felices.
Al principio del blog instalé un contador oculto... y me olvidé de él, como de media docena de gadgets hechos en html en el main del blog y que nunca he llegado a depurar. Hoy me ha llegado un email de esa pagina avisando de que voy a alcanzar el limite de visitas permitidas de forma gratuita y que a partir de las cien mil visitas tendré que pagar para recabar datos.
92.331 visitas en cuatro años y un mes (excluyendo las mias propias, que no se contabilizan); 295.459 impresiones en todo este tiempo. Soy hombre de numeros... y estos me dicen que el 44,13% de las personas que han entrado en mi blog lo han hecho directamente, escribiendo la dirección en la barra del navegador (lectores fieles). Google me ha enviado 28651 visitas.
Un gráfico me dice que las visitas actuales solo llegan al 65% de la media del blog, lo que viene a ser que he perdido a más de un tercio de visitantes diarios desde hace un año. Y hablando en terminos generales, hay una media de 62 visitas diarias que ven una media de 3,1 paginas por visita.
Me han leido desde los 5 continentes, siendo Europa y America (concretamente America del Sur) quienes se llevan el 98% de las visitas totales.
Despues de esto he mirado la carpeta "blog" de mi cuenta de correo, y he recibido 2459 emails de personas conocidas a través de este medio. Un poco intrigado me he metido en el menu de edición y he comprobado las entradas, con este habré escrito 645 post's, y hay 4197 comentarios... de los que aproximadamente el 40% son respuestas mias. Esto significa que recibo casi tantos comentarios en publico como emails privados (siendo esta última tendencia la más habitual desde hace unos meses).
No os podéis imaginar como me siento ante estos datos... así parecen un poco frios, pero para mi supone que cada dia lo que escribo llega a decenas de casas, que mis ralladas pueden llegar a interesar a alguien, y que hay gente que aguanta paginas y paginas de aburridos post's como este. Y lo que me sorprende es que se sigan dejando caer por aquí. Es de agredecer.