El lunes caminaba por el centro de Leganes, como siempre a paso ligero. Venía de sacar dinero del banco y me dirigía a mi casa a comer antes de volver a clase.
En esto que se me acerca un hombre ajado y desaliñado, con una boina sucia, una barba blanca de varios dias y ropa que seguramente tendría que haber visto tiempos mejores. Me tiende algo, un papel o cuadernito, le pregunto que es. Lo cojo antes de que me responda y me dice "la voluntad", se lo devuelvo alegando que sólo llevo los 50 euros que acabo de sacar del cajero y que me han dado en un solo billete (verdad), no me coge lo que ya veo claramente que es un cuadernito pequeño, de 8 o 10 hojas, igualito al taco que lleva encima. "Da igual, te lo regalo, la proxima vez que me veas me das algo". Despues de agradecerle el gesto y preguntar por donde suele parar para cumplir mi promesa, me despido y me voy. Antes de perderle de vista veo que otro chico ni le mira cuando le tiende el mismo tesoro que llevaba guardado en mi cazadora.
Una vez llego a casa abro el cuadernito (papel satinado, publicacion hecha en alguna imprenta) y lo leo con suma atención... para descubrir que no es otra cosa que una poesia que no me gustó nada e imagenes de oleos que seguro apasionan a los seguidores del arte moderno pero que a mi me dejan un tanto indiferente (seguramente por no entender de arte moderno...).
Pero como nadie tiene la razón absoluta sobre gustos, y cada cual puede disfrutar creando lo que le parezca (como hay mucha gente que no le gusta como escribo :))... conservaré ese tesoro... sólo me resta encontrar un hueco para visitar la ciudad por donde para y hacer valer mi palabra. Firma como Viera y se hace llamar "el canario", por lo visto lleva años repartiendo sus creaciones.
Deja que explote, deja que mis instintos afloren... me perderé en tu cuerpo con los cinco sentidos abiertos al extremo. No te asustes, no corras, tenemos tiempo. Que el universo se pare para que pueda disfrutar de tus labios, que mi lengua navegue por todo tu cuerpo sin miedo a interrupciones, sin miedo a prejuicios, sin miedo a sobresaltos, sin miedo al miedo.
Mis dedos tibios y mis ardientes labios recorreran tu piel, mis manos acariciaran toda parte de tu persona. No apartes tu mirada de la mia, deja que nuestro espiritu se una en preludio de la fusión de nuestros cuerpos. No tengas prisa. Saborea cada segundo...
Suspira, llora o rie, lo haremos juntos. Deja que el placer te invada, derribaré las murallas para que no encuentre obstaculos. Seguiremos el ritmo de los latidos de un sólo corazon mientras nuestra pieles humedas de sudor y excitación juegan entre ellas. Un lento compás que frenéticamente aumentará su ritmo, como un tambor de guerra...
Y lucharan nuestros sentidos por mantenerse despiertos. Serán bombardeados con nuevas sensaciones, viejos placeres redescubiertos y se olvidaran de un presente. No existe el tiempo... si te abandonas a mi, pararé el fluir del universo para hacernos nuestros.
Si te abandonas a mi...
-negro de mierda. Ojala te mueras
El agente de seguridad (de color) y dos compañeros estaban echando a dos drogodependientes a los que han pillado robando (dos litronas y varios paquetes de jamon serrano). En esto que uno de los fallidos ladrones vuelve a amenazar al de seguridad.
-como me vuelvas a sacar la porra te mato. Mierda.
Y acto seguido ha cogido un palo (de los que tienen en las cajas para separar las compras mientras ordenas las bolsas) que ha golpeado a uno de los trabajadores en la cabeza, mientras que el otro drogadicto se liaba a puñetazos con otro de los trabajadores. El de seguridad ha cogido la porra y ha golpeado en el brazo al que llevaba el palo.
Me he ido a acercar, pero una mujer me ha cogido del brazo y otros dos hombres se han encargado de que nadie más se acercase (el palo y la porra bailaban sin demasiado control). Debo agradecerselo a la anonima mujer, pues seguramente me hubiera llevado algun golpe de haberme metido. Uno de los asaltantes se cae llevandose un fuerte golpe en el costado contra una de las cajas y el de seguridad va a inmovilizar al otro.
Resultado: Un trabajador palido y con un buen golpe en la cabeza. Dos o tres mujeres a las que han tenido que sacar a tomar el aire por los nervios. Los dos asaltantes riendose y amenazando al de seguridad y a los trabajadores (con frases con "ojala te hubiera matado del golpe") delante de la policia (tres policias que se limitaban a tomarles los datos y que les han dejado marcharse una vez ha quedado todo registrado).
El ambiente tenso. La gente gritando a favor de que el guardia de seguridad diese con la porra en la cabeza a los agresores y despues comentarios sobre como está extendiendose la delincuencia impunemente.
Por esto he decidido crear un nuevo blog, paralelo a este y vinculados. Necesito un lugar donde analizar este tipo de situaciones, y para ello debo impersonalizarme demasiado... nada que ver con el espiritu de este blog.
La nueva dirección: http://imperson.blogspot.com/
Como miembro del grupo gestor del Banco del Tiempo de Leganes, una de mis funciones es la captación de socios y su pleno integramiento en la asociación. Para ello nos valemos de entrevistas personales cara a cara en las que un entrevistador (en este caso yo), queda con un aspirante a miembro y mantienen una conversación coloquial donde vamos pasando por distintos puntos... estudios, cursos, intereses, hobbies, que ofrecer, que buscar, alternativas, el funcionamiento de la asociación...
Aunque parezca un interrogatorio, nada que ver, porque todo se enmarca en una conversación donde puedes elegir que decir o que no decir (¿para que voy a poner que tengo un curso de cocina si no quiero enseñar a cocinar?). Normalmente siempre se acepta al entrevistado (no es un examen!, es un mero tramite para completar la ficha de socio).
El caso es que hoy tenía una entrevista (la tenía mi compañera, pero no ha podido venir y me iba a hacer cargo yo) y el candidato a socio no ha aparecido. Y al contrario de los que me rodeaban, me ha dado un poco igual, he perdido media hora de mi tiempo, pero ya está.
Parece que como miembro del Banco del Tiempo me sobra tiempo... pues bien, ando algo justo. Y estas entrevistas me quitan horas de descanso (lo que no haga ahora, lo tengo que hacer despues... y eso contribuye a que me acueste más tarde).
Hace meses me hubiera comido la cabeza de mil formas diferentes (la eterna lucha entre el deber y el querer, el bien y el mal, y todo eso)... hoy solo pienso que el que se lo pierde es él. Y que si quiere ingresar, que llame y se preocupe de estar puntual en la siguiente convocatoria.
No puedo aspirar a más hoy, mi tiempo sólo me permite poner la canción que llevo escuchando todo el dia (haciendo el guión de practicas, paseo para arriba, paseo para abajo... imprimiendo el guión de practicas... más paseos...). Seguro que los que estaban a mi lado en las aulas informaticas se han extrañado de ver a un tio moviendo los labios como si cantara... cuanto más la escucho, más me gusta, sobre todo la parte marcada con negrita (con volumen alto es tremendo).
De este lugar
Cuentan leyendas e historias
Y juran que así ocurrieron.
Siglos atrás,
Las tropas del rey en sangrienta batalla
A un joven de muerte hirieron.
Y el rey con crueldad
Así le encerró,
Su herida mortal
No obtuvo perdón,
Y en el suelo esperó
La muerte sin ver la luz del sol.
Sin fuerzas ni voz
Vio a una bella mujer
Que con pena llegó hasta su celda.
La muerte burló,
Su corazón ahora ciego de amor
Comenzó a latir con más fuerza.
Ella hija del rey,
Él un simple ladrón.
El destino, tan cruel,
Les robó el corazón,
En aquella prisión y lejos de ver la luz del sol.
-Déjame morir en tus brazos y así
Un instante tal vez podré ser feliz.
Esta vez la vida se ríe de mí
Y ahora toca a su fin aunque quiera vivir.-
-Quiero ver
Tu rostro otra vez.
Ahora se
Que siempre estaré junto a ti
Aunque vaya a morir.-
Dicen que ella escapó
Con su joven ladrón,
Pero el rey les halló,
Y con furia y dolor, ante un beso de amor,
A los dos con su espada atravesó.
-Déjame morir en tus brazos y así
Un instante tal vez podré ser feliz.
Esta vez la vida se ríe de mí
Y ahora toca a su fin aunque quiera vivir.
-Quiero ver
Tu rostro otra vez.
Ahora se
Que siempre estaré junto a ti
Aunque vaya a morir.-
Cuentan que
En las noches de invierno se ve
Nacer una flor donde no llega el sol.
Por amor
Sus almas unidas están
Y se pueden amar para la eternidad.
Puede ver
Su rostro otra vez,
Y saber
Que siempre estará junto a él,
Junto a él...
Avalanch - Cambaral
1. Ogro I
2. Ogro II
3.Ogro III
4. Ogro IV
Y Ogro regresó a su santuario, su cabaña al pie del lago y al lado del bosque. Paseó por sus habitaciones, de nuevo en silencio, sin más eco que sus pasos. Y quiso llorar. Le oprimía ese silencio.
Se mordió el labio y repitió, hasta que no pensó en otra cosa, que es mejor encender una luz que maldecir la oscuridad. Y llegó a la puerta. Y salió al aire libre. LLevaba meses sin estar a cubierto, y ahora de nuevo tenía una casa que mantener. Por supuesto, tendría que derruir buena parte de las paredes construidas hasta ahora, pero podría reciclar ese material para hacer las nuevas paredes y los nuevos techos.
Caminó hasta el lago y se asomó a la orilla, se vio así mismo reflejado... clavó la rodilla en el suelo para verse mejor. Tenía algunas cicatrices nuevas, sus rasgos parecían algo diferentes, quizás un poco más adustos. Se sonrió así mismo, el aire fresco le sentaba bien. Se palpó el cuerpo, cicatrices antiguas, cicatrices nuevas... tocó una vieja herida que parecía no querer cerrarse, pero con la que había aprendido a vivir y que sólo requería un par de minutos al dia para cambiar la venda. Sonrió de nuevo.
Se sentía preparado. Fue hasta donde había dejado su equipaje y dio una cariñosa patada al conejo que estaba tumbado sobre su mochila. Este abrió medio ojo y le insultó inentendiblemente. Volvió a dormirse. Ogro disfrutó mucho dando un tiron de su petate y viendo volar a su amigo Conejo... no había encontrado su nombre, pero pensaba forjarse uno y ahora necesitaba de la cargante voz de su compañero para hacerlo.
Pues bien, hoy toca ponerse serio, no melancólico. Que no se confundan mis estados de animo.
Hace dias que se puede notar, unicamente leyendo el blog o con un analisis profundo de mis gestos del dia a dia (no creo que nadie haga esto ultimo), que tengo una leve crisis personal que se traduce en un estado de animo más voluble, generalmente con tendencia al melancolismo (derrotismo y similares), cierta incapacidad para lidiar con problemas que habitualmente solvento sin más ayuda que una taza de café (para no dormirme mientras busco la solucion). Todo de forma leve y superficial, pero que se puede notar facilmente.
La verdad es que no es un problema que se remonte a tan solo "unos dias". Pero tampoco es algo vital (ahora), ni me quita el apetito, ni el sueño y quizás sólo me provoque cierta apatía en algunos momentos del dia (cuando estoy cansado o cuando pienso con especial enfasis en el problema en sí, como viene pasando desde hace una semana). Lo malo es que tengo la costumbre de, o escribir con historias que enmascaran el problema o de ser demasiado transparente... sin termino medio.
Como hace tiempo que pase por un pronunciado bajón, allá por el inicio de este blog, conservo todavía suficientes herramientas de aquel incidinte para estos nuevos enfrentamientos de mucha menor intensidad... una de estas herramientas no es otra que el ansia de conocimiento, el necesitar absorber información sobre gente que haya pasado lo que me está pasando a mi.
Y en una de las febriles lecturas he encontrado este parrafo... que me aporta tranquilidad por el mero hecho de escribirlo: "en la vida de todo hombre hay un momento en el que se imponen dos preguntas: ¿adónde voy? y ¿quién me acompaña?. Nunca hay que invertir el orden de las preguntas. De lo contrario, estaremos en serios problemas"
Cuando estoy de examenes o con practicas, que debo concentrarme al maximo en lo que estoy haciendo, tengo un cuaderno sobre la mesa, al lado de los apuntes y libros, voy escribiendo todo aquello que me cruza por la mente, para sacarlo y no darle vueltas.
Hoy, despues de hacer algo de ejercicio, he cogido el cuaderno y he echado un vistazo a lo que escribí a mediados de septiembre... no se porqué anoté esta parte de la canción de Fito (Soldadito marinero), pero lo cierto es que en la ducha me ha dado por cantarla...
Despues de un invierno malo
una mala primavera
Dime porque estás buscando
una lágrima en la arena
Te veo presa, las cadenas de hierro te aprisionan, debes estar cansada de intentar luchar para escapar pues no te mueves. Probablemente ya te has acostumbrado, quizás hasta tu misma elegiste esas cadenas, y te enorgulleces de tenerlas... como si tu hubieras decidido estar presa y la libertad fuese algo que te aterra.
No, no me mires así. No mires el mazo que tengo en la mano, romperá tus cadenas, pero quizás no te libere. ¿Acaso no sería cambiar tus cadenas de hierro por otras más livianas? Y veo el miedo en tu mirada, sólo ves a un ogro con un mazo, no comprendes mis intenciones, te alejas. Me alejo.
Te doy miedo por mi apariencia, sin comprender que no son mis manos las que te han atado. Te asusta mi mirada, y fue otra la que te hechizó. Y sin embargo, por mucho que crea poder liberarte, se que tienes razón y que no hay alas para volar.
Que más da una prisión de piedra con cadenas de hierro o un palacio de cristal con cadenas de plata...
Mi jornada ha empezado a las 8 de la mañana, desde esa hora hasta las 10:30 de la noche no he parado más que media hora para comer y otra media hora en total en desplazamientos. Me he mojado, he sufrido las inclemencias de la electricidad en forma de dos descargas de 50 voltios, me duelen los ojos de cansancio y hasta hace media hora mi estomago rugía de hambre.
Pero estoy contento. Por primera vez en dias siento que todo va arreglandose. Me siento bien... y mejor me voy a sentir en 10 minutos, cuando me meta en la cama, arropado y escuchando la lluvia golpear contra los cristales.
A pesar del alentador titulo... efectivamente voy a quejarme. La verdad es que ultimamente doy la impresión de no parar de hacerlo, de vivir en un constante enfado... no es así... solo esta siendo durante esta ultima semana.
Llego a clase y pregunto a mi compañero de practicas si ayer entregó el documento conjunto que debemos entregar al profesor. Me dice que no porque no sabe hacerlo y porque otros compañeros todavía no lo han entregado. La mala leche que me ha entrado ha sido tremenda... una escalada de un deseo irracional de ponerme a dar voces. Lo primero es que me importa bien poco lo que hayan hecho otros compañeros, no me hace gracia que no sepan hacerlo, pero oye, estamos en una universidad y cada uno debe buscarse sus mañas para conseguir salir adelante. Cuando le recrimino que la fecha limite era ayer me dice que no ha tenido tiempo para buscarlo... pero tiene tiempo de quedar casi todos los dias con la novia algunas horas.
Cuando me tocó a mi entregar mi parte estuve un par de dias durmiendo menos, ya que mi unico tiempo que puedo sacar es por la noche (entre clases, cursos y practicas), lei libros, busqué en internet tanto en español como en ingles, acudi al profesor (que para eso nos dejan su email, para preguntar dudas)... y lo entregué a tiempo sin emitir una sola queja. ¿Por que cojones se cree que su tiempo de ocio es más importante que el mio? Me parece estupendo que quiera ver a su novia, si yo pudiera lo haría (sólo me falta la novia :)), pero no debe olvidar que el que yo apruebe depende tambien de su trabajo y de su puntualidad al entregarlo.
Por si fuera poco, cuando todavía me estaba mordiendo los labios para no explotar, otro compañero de practicas (de otra asignatura) me viene con lo mismo, que no ha sabido hacerlo, que se puso ayer, y que hay que entregarlo hoy y que si podemos quedar. Pues es que me come la moral, pues yo he hecho mi parte durante el fin de semana (y no tenía un finde precisamente bueno) y si algo no te sale, puedes recurrir a mil sitios, si tienes tiempo.
Por ultimo, para terminar de arreglar el tema, me toca pringrar de 4 de la tarde hasta las 6 de la tarde (que tengo que ir a clase hasta las 9) haciendo otra practica, somos 4 en el grupo y solo 2 nos preocupamos de que todo esté a tiempo (uno de ellos coincide con el que se puso ayer a intentar resolver algo que requiere horas).
Vamos a ver, a mi no me importa ayudar a la gente si algo no sale, hace un par de viernes llovia a cantaros, me llamaron para solucionar un problema y me presente a 10 minutos de donde estaba para echar una mano, en mi ropa habia suficiente agua como para aumentar el nivel de los embalses, pero estaba de buen humor, porque trabajamos en equipo y todo va saliendo. Igual que a veces a mi no me sale algo y debo pedir ayuda al compañero o al profesor... ¡nadie es perfecto!
Lo que me molesta, lo que realmente me jode, es que por desidia, por vagancia, no se hagan las cosas. Y no soy precisamente un ejemplo de trabajo constante, pero si hay en juego algo más que mis propias notas (las de un compañero por ejemplo) pierdo el culo por hacer lo posible para completar todo. Aunque me quede sin dormir.
Cada vez que digo que prefiero trabajar solo antes que en equipo la gente me mira raro... pero es que debo tener el mal tino de elegir los equipos equivocados.
La ira me quema por dentro. Me inunda, me controla y me hace sentir odio. Necesito golpear con fuerza la indolencia, sesgar la existencia de aquellos que se escudan en sus propios problemas para olvidar al mundo. Necesito sentir la espada de la justicia en mi mano, partir con mis jinetes de negra armadura y atormentar a los que dañan, sin importar quienes sean. No dejar piedra sobre piedra.
Que las nubes me acompañen descargando su fuerza en incontables rayos. Que las montañas hagan rodar sus rocas y derrumben la humanidad. Que el fuego purifique la tierra que, como humanos, hemos mancillado. Que los mares nos traguen y hagan desaparecer a tan imperfecta raza del planeta. Que los vientos borren nuestras huellas y el mundo respire tranquilo ante la ausencia del animal más avanzado y menos racional.
Y me sonries... y la ira se disipa... y solo quiero otra sonrisa.
Hago un pedido a Hong-Kong, uso ebay para ponerme en contacto con la empresa, asi que en principio no tendría que haber habido ninguna incidencia, pero ese mismo dia me mandan un email en un español un tanto estrambotico para advertirme que el pedido sufrirá un retraso de 3 dias por no encontrarse el articulo en stock, les contesto tanto en español como en un ingles supongo igual de estrambotico de lo que a mi me parecia su español. Me contestan (esta vez en Ingles) agradeciendo mi paciencia y me pidan disculpas por segunda vez, mientras que señalaban su agradecimiento por haber contestado en Ingles (es una empresa que tiene su principal volumen de negocios en EEUU).
Despues me han mandado un email para avisarme de cada paso que daba mi pedido, desde que sale del almacen hasta que llega al puerto, hace el trayecto en barco, descargan en un puerto español. En total, sin contar el retraso por falta de stock, tardan 7 dias lectivos. Una vez en España ellos agradecen la compra por enesima vez y delegan responsabilidades al servicio de correos ordinario. Pues bien, nuestros queridos funcionarios de correos tardan 6 dias en decidirse a mandarmelo, con mi sorpresa de que en vez de traermelo en mano (que la oficina de correos está al final de mi calle, no más de 3 minutos) dejan un papelito diciendo que el usuario no está en casa... pues bien, yo estaba en casa (porque no me he movido de casa hasta las 12 y al bajar ya estaba el aviso de recibo diciendo que a las 11 no contestaba nadie).
Es decir, los gastos de envio superan al coste del articulo (precio de envio estipulado por correos en convenio comercial), los carteros han recibido un ingreso extra hace poco porque la empresa publica tiene beneficios (que no se quejen de falta de primas) y ¿casi tardan lo mismo en recorrer 200 metros que miles de km? Y encima sólo para decirme que puedo ir a recogerlo cuando yo he pagado un servicio para que me lo traigan en mano.
¿Todavía la gente se sorprende que los paises asiaticos empiecen a comernos terreno laboral?
"A veces pienso que el cerebro tiene envidia del corazón. Y lo maltrata y lo ridiculiza y le niega lo que anhela y lo trata como si fuera un pie o el higado. Y en ese enfrentamiento, en esa batalla, siempre pierde el dueño de ambos"
"Es mejor fracasar joven para tener toda una vida para recuperarse"
Cuatro amigos - David Trueba
No es una lectura para animos bajos...
El terroso líquido recorrió su garganta, humeante, lejos de refrescarle, pero saciando su sed. Saboreó durante unos instantes más el amargo sabor que había dejado en su boca, casi como si hubiera mordido un trozo del bosque que le rodeaba. La claridad aumentaba a medida que la noche quedaba atrás.
Reunió todas las fuerzas que creía tener para levantarse y seguir caminando, su mente era un confuso agujero lleno de imágenes y sonidos, palabras del pasado, sueños del presente y pesadillas de siempre. Paso a paso. Se obligaba a no parar. A poner un pie delante del otro. Constantemente. Uno y otro.
La parte racional le decía que lo mejor sería encontrar un lugar cómodo donde tenderse a descansar, por unos minutos o para el resto de su vida, que podía ser lo mismo. Y sus instintos que debía seguir andando hasta encontrar un camino y abandonar de una vez senderos y trochas que parecían dibujar un laberinto sin fin.
Escuchó un ruido. La voz que le aconsejaba descansar se plegó al subconsciente. Afloraron los instintos con mayor fuerza. El cansancio y el dolor se desvanecieron en el aire, su cuerpo se irguió imperceptiblemente, sus brazos y piernas se tensaron, su respiración se hizo más profunda y tenue.
Un solo sonido destacó por encima de la marabunta del bosque, el sonido de unos apéndices acolchados pisando el suelo alfombrado de hojas. Prestó más atención. Ahora podía distinguir el leve jadeo. Sus rodillas reaccionaron en el momento oportuno, un breve lapso de silencio proseguido por la aparición de una figura enorme en su campo de visión. Dejándose caer hacia atrás evitó que aquel descomunal animal le arrancase medio torso de un mordisco. Se impulsó desde el suelo, consiguió mantener un precario equilibrio y corrió tan rápido como sus piernas eran capaces.
BUM BUM.
El sordo latido de su corazón retumbaba en su cabeza, en su pecho, en sus brazos con cada paso sus músculos se contraían dolorosamente, notando la falta de alimento en los últimos días.
BUM BUM.
Se sintió casi desfallecer cuando escuchó de nuevo los acolchados pasos acortando distancias. Maldijo todo lo que le había llevado hasta allí y maldijo su cobardía. Un paso en el vacío, no encontró suelo donde debería haber estado un firme apoyo. Cayó. Golpes, cortes y suspiros. Quedó inconsciente.
Abrió tímidamente un ojo, el sol ya lucía con intensidad y pudo ver el desnivel por donde había rodado. Por un momento se alegró de estar vivo. De haber escapado. Se incorporó lentamente, ignorando los crujidos de su maltrecho cuerpo e invadido por el optimismo. Pero el terror le invadió en seguida, una pesada sombra aguardaba a que despertase
a su perseguidor no le gustaban las presas fáciles.
Es curioso como pueden pasar dias y dias sin leer una sola pagina de un libro, y hay semanas en las que me puedo leer 4 libros. Devorar sin compasión miles de hojas. Perder horas de sueño y descanso
Me acabo de terminar cuatro amigos de David Trueba y me ha dejado una incomoda sensación de tener algo sin acabar. Al principio he disfrutado con la historia, pensando en lo familiar que me resultaban ciertas anécdotas pero el libro se ha ido poniendo serio, hasta ver como los protagonistas tienen conversaciones profundas entre ellos, y no hablando de metafísica, si no de la convivencia, tema tan trillado en mi propio grupo de amigos.
Y ha sucedido. Como cuando estoy jugando al airsoft y escucho un tiroteo a 50 metros de mí, se que si corro 10 metros me meto de lleno en la escaramuza, 2 segundos de carrera y a pesar de que todos los instintos de autoconservación te deberían impulsar a correr en sentido contrario, cubres los 10 metros sin escuchar una sola voz en contra. Hasta que ya es tarde y no puedes salir. O como cuando llevas las copas justas para sentirte ligeramente cargado, y sabes que no debes tomar ninguna más, pero de nuevo se hace el silencio y el instinto de autoconservación es acallado por otras fuerzas mayores. Hasta que te levantas sintiéndote fatal y maldiciendo la última copa. O al ver el balón botando quedamente, solito, y tus pulmones deberían advertirte que otro estallido de energía y se pondrán en huelga, pero no escuchas ni una sola reivindicación hasta que no caes al suelo (medio empujado, medio dejandote caer) después de patear el balón, luchando por conseguir bocanadas más profundas de aire. Como en tantas otras ocasiones
El caso es que me he visto corriendo de lleno hacia mi propio interior (como si me acercase corriendo a un muro), a la par que leía las últimas páginas del libro, y de nuevo se ha hecho el silencio. Me asusta ese silencio. Quizás por eso me gusta dormir con música puesta para no tener que enfrentarme a un silencio introspectivo. Creo que me asusta la soledad conmigo mismo.