I don't live anymore
I don't love me this way
I don't have wings to fly
I don't have, gone away
I don't have anything
I don't need a space to breathe
I don't hide in sanctity
I don't need what you need
I don't have, have a space to...
"I Don't Have" - Nickelback
Todos, absolutamente todos, tenemos nuestras costumbres, nuestras manias y nuestros miedos. Enmascaramos el resto de nuestro ser para que esas costumbres, manias o miedos sean lógicas, respetables y minimizadas.
Por ejemplo, odio conducir, a pesar de tener 10.000 km de experiencia a mis espaldas, es algo que me puede, y hace que cada viaje, cada trayecto, sea un suplicio que dura dos dias, el propio en el que tengo que conducir, y el dia anterior. Por supuesto, aplicandome la regla anterior, he conseguido darle un aire romantico a mis viajes en transporte público... prefiriendo sobre todo los trayectos nocturnos poblados de bellas y provocadoras hadas, de gigantescos ogros y de traicioneros seres retorcidos. ¿Para que conducir pudiendo disfrutar de esos curiosos viajes?
Cada uno de estas costumbres, miedos o manias son respetables siempre y cuando no hagan daño a nadie, mientras queden en la estricta región de uno mismo. El problema reside en que hay gente que no aprende a respetar más que los suyos propios, sin tener en cuenta que todos necesitamos esa región de alivio... y entonces, en ese momento para esas personas, el mundo es único y es el que ven con sus ojos. Y no quiero que me tomen por ciego, yo tambien veo otro mundo que ellos no tienen.
Esas costumbres, manías e incluso miedos, son las cosas que nos hacen unicos y exclusivos. Perder eso sería como renunciar a ser uno mismo, los miedos, siempre que no nos marquen límites no son negativos. Ves? tu has encontrado el modo de que aunque temas conducir, no te privas de viajar y conocer sitios nuevos, incluso, le has sabido dar ese toque romantico que dices...aun disfrutas más que el que no lo teme.
Todos necesitamos nuestro espacio privado, donde ser como somos por dentro, donde nuestra vulnerabilidad salga sin sentirnos desprotegidos.
Cada cual necesita su propia libertad eso si, como bien dices, sin que ello signifique privar a los demas de la suya.
Un beso Träne, sigue siendo tan exclusivo como eres, a mí siempre me pareciste un ser maravilloso por ello.
vaya, me sonrojaré :).
El problema surge (y por eso escribí el post) cuando nos topamos con personas incapacez de ver más allá de sus propias barreras. Ridiculizan las tuyas aunque en un pasado las compartiera contigo y ahora las haya saltado... para ellos el mundo cambia segun cambian ellos mismos... y eso es un egocentrismo que les lleva a ignorar que hay más gente en otros mundos diferentes al suyo propio. Era una especie de alegato contra la ceguera y a favor del respeto :).
Un beso