La espalda encorvada, la cabeza pesada, densa, unos pinchazos en el pecho, dolor de estomago, cansancio en todo el cuerpo...
Si alguien me pregunta diré que la enfermedad son "palabras", simplemente esto, pues cuando me pongo a escribir mi espalda se recoloca haciendome medir 1'86 de nuevo, mi cabeza se aclara con un sordo dolor previo, como si se vaciase de agua, mi pecho deja de doler y mi estomago se olvida de mi... el cansancio no desaparece del todo, pero teniendo en cuenta el dia, es todo un alivio la breve tregua de mis musculos.
House intenta convencer a un paciente, un eminente musico, para que le deje curarle. A pesar de que el paciente ha declarado que prefiere morir antes que recuperarse y quedarse sentado en una silla de ruedas, House sigue pidiendole que le deje hacer pruebas para diagnosticar un tratamiento correcto y le asegura que si no consigue nada, él mismo le ayudaría a morir. El paciente se indigna al principio diciendo que no quiere ser la cobaya de nadie, despues da las verdaderas razones de su decisión.
Paciente: Se acabó, no tengo fuelle. La sesión de la otra noche con esos chicos fue una prueba para ver si aun podía tocar... No puedo.
House: ¿Es todo lo que es? ¿Un musico?
P: Tengo un don, igual que usted.
H: ¿A sí? al parecer me conoce mejor que yo a usted.
P: Conozco esa cojera, y el anular desnudo. Y esa personalidad obsesiva guarda un gran secreto. Nadie arriesga la libertad y la carrera por salvar a alguien que quiere morirse si no se tiene algo, lo que sea... un don. La razon por la que la gente normal se casa, tiene hijos, aficiones, lo que sea, es que no posee esa cosa que te clava las espuelas. Yo tengo la musica y usted esto, una cosa en la que piensa continuamente, el don que lo hace excepcional. Sí, nos hace grandes, los mejores... lo que nos falta es todo lo demás: Una mujer aguardandonos en casa tras el trabajo con un beso al entrar. Eso no es para nosotros.
H: Pero Dios creó el microondas.
P: Sí, y cuando se acaba, se acaba.
H: Ya...
Obviamente, no voy a decir que yo tengo un don escribiendo... sería una muestra de prepotencia innecesaria despues de leer a tanta gente que de verdad sí tiene el don de las palabras y comprobar que lo mio son apenas unos balbuceos (y no pasaré de este punto) de un idioma complejo y extenso que sólo unos cuantos pueden hablar fluidamente. Tampoco es falsa modestia... de hecho, es una de las pocas cosas que tengo claras y en la que apenas admito opiniones ajenas.
Pero nadie podrá arrebatarme el verdadero don que ocultan estas lineas... un don mucho más comun de lo que puede parecer (conozco a decenas de personas que lo poseen, aunque no por ello deja de ser un don, un regalo): el poder abstraerme hasta tal punto que las palabras fluyen al papel llevandose todo lo que me daña y preocupa.
La escritura posee un poder liberador, es un alivio valerse de ella para decir cosas que a veces no nos atrevemos de otro modo. Es algo que se disfruta.
Y quizás todos tenemos un don con el cual nacemos, supongo que todo es cuestión de observar bien.
Un beso
Te preocupa haber encontrado una válvula de escape a tus preocupaciones? Saber de qué modo todo eso se diluye? Pues a mí no me parece preocupante. Hay quien se fuma un porro para evadirse o se toma una copa, en tu caso, teniendo con que y donde escribir, te resulta mas barato y mucho más sano.
No te preocupes hombre, al menos por eso no.
Y con lo del don, sabes que difiero en tu opinion, pero como dices...no admites opiniones ajenas. Y la opinion es como el culo, todos tenemos una. (ya te diré de quién es esa cita, jajaja)
Minerva: Creo que todos tenemos un don... solo que a veces no es facil hacerlo funcionar o no nos atrevemos a dejar la senda segura :).
Un abrazo.
bamby: no me preocupa... simplemente que parece que es mi enfermedad, pues cuando las suelto mejoro :). Esa cita la conozco, solo que ligeramente ampliada... "las opiniones son como los culos, y la que apesta es siempre la del otro"... sabiduria popular :).
Un abrazo.