Ya va a hacer una semana desde la ultima vez que escribí.
Entre que en casa estamos de obras, que he empezado a estudiar, que duermo fatal con este calor puramente iberico (como hecho de menos las mantas de Irlanda) y el mazazo que supuso lo de Neo, pues el tiempo vuela en una sucesión de dias indeterminados.
Ahora mismo tengo 10 minutos, mientras me tomo un café tan cargado que parece que cada sorbo es una invitación al infarto. Pero necesito estar despejado y activo hasta dentro de 4 horas.
Hoy, rebuscando en la carpeta que me llevé a Irlanda, he encontrado algo que escribí en un momento de aburrimiento, un domingo que tomé el lunch en solitario a la orilla del rio emblematico de Newbridge... parece triste, pero cuando pasas tanto tiempo (13 horas al dia, 6 dias a la semana) con un monton de estudiantes de entre 10 y 17 años, preguntando por todo y exigiendo saber... la tranquilidad no es triste.
Y curiosamente hablaba de la muerte, esto ya no va por lo de Neo, lo escribí 3 semanas antes de que tuvieramos que sacrificarle, que hayamos sufrido su perdida porque generalmente se suele humanizar a la mascota hasta otorgarle el rango de "parte de la familia" es otro tema.
El caso es que vino a mi mente ese tema porque me quedé un rato largo observando el fluir del agua, y me acordé de un discurso de Steve Jobs en el que decía que la muerte es el mejor invento de la vida, quitar de enmedio lo viejo para poder hacer crecer lo nuevo. Algo parecido a lo que propugna la filosofia zen, "Antes de llenar la taza, debes vaciar la que ya tienes" o "para poder construir un nuevo templo espiritual, debes colapsar el que ya existe y que se derrumbe para dejar el solar disponible".
La filosofia del cambio... el mismo Steve Jobs comentaba que cada mañana se levantaba y se preguntaba si era feliz con lo que estaba haciendo... en cuanto se contestaba negativamente varios dias seguidos, pensaba en aquello que era necesario cambiar para que la respuesta volviera a ser afirmativa al dia siguiente.
Es curioso que a veces el cambio es capaz de traer más estabilidad que la permanencia.
Adelante, escribe