Creo que por primera vez en años (o incluso en mi vida) puedo decir que estoy enganchado a un reality... pero es que me hace cierta ilusión ver como intentan meter en cintura a unos cuantos adolescentes. Debe ser que tras algunos años trabajando con ellos he guardado algun resquemor inocente. Ya sean actores, o bien gente real (que estoy por creermelo por lo que he visto), está curioso como pasatiempo.
De todas formas, me hace gracia, intentan dar un aire de dureza... y para mi que no es más que eso, un aire. No hace tanto, 10 años, fui de campamento como alumno, era bastante más pequeño que los que salen en este reality y me trataron mucho peor en comparación con lo cabrones que pueden ser estos. Cuando no comen, les alzan un poco la voz, y les guardan la comida para la siguiente... yo todavia recuerdo al cabron del cura pegandome en la frente para que abriera la boca y meterme lo que fuera que hubiera para comer a presión. Y si ni por esas, no me guardaban nada para la siguiente, pero me obligaban a pasar el dia a pan y agua para coger hambre para la siguiente.
El dia que se nos ocurrió enfrentarnos a los monitores porque queriamos dormirnos un par de horas más tarde, tuvimos un rotundo no que solo nos impulsó más a estar despiertos. Hasta que vino el de la linterna y nos sacó, en mitad de la noche, en gayumbos a pasar un par de horas de cuclillas... ¡ojala me hubieran mandado a mí fregar una clase! Así, a cubierto. Y a otro grupo, más escandaloso les quitaron las ganas de reirse al hacerles correr entre rosales. Eso era creatividad pura y dura...
No recuerdo ese campamento como algo malo, quitando unos castigos más o menos merecidos, estuvo entretenido. Lo suficiente como para seguir yendo año tras año. Y más tarde ser uno de esos monitores que preparan juegos y charlas en grupo, pero que no duermen de noche y que se pasean con la puta liternita hasta altas horas de la madrugada para levantarse de los primeros a servir el desayuno.
Con 13 años no derramé lágrimas más que una vez... en este programa se pasan llorando todo el dia y eso que ya tienen sus 17 o 18 añitos... ¡pero vamos a ver! Con la edad de esta gente yo ya estaba pensando en irme a Irlanda a trabajar en verano, con una familia que no conocía de nada, lejos de la mia, con un idioma que no dominaba en absoluto. Y cuando me pasaba algo malo, ¡¡no lloraba!! Me mordía los nudillos de pura rabia y seguía con lo siguiente.
Desde luego han cogido o a muy buenos actores, o a gente a la que le hace falta vivir un poco más fuera del mundo del "todo vale". Que pisen el suelo más allá de su parcelita de poder.
Respecto a la situación real, donde hay videos de adolescentes pegando a profesores, o riendose de alguien tras vejarle, me hierve la sangre... de muy mala manera. Siempre he jugado y seguido el juego a los adolescentes con los que he trabajado, total no me he llevado más que 3 o 4 años.... pero cuando se pasaban de la raya, y lo hacían, hay que ponerse serios y decirles cuatro palabritas, o darles 4 voces si no quieren escuchar, pero hay que pararles de alguna forma. Lastima que muchos padres no solo no apoyen esto, si no que encima protegen más a esos hijos del "todo vale". Si roba es porque "se siente solo y aburrido", si pega a otro más pequeño es "hay que entederlo porque tiene problemas de autoestima"...
Por mera supervivencia, si cada vez son más los inutiles (y con esto me refiero a gente incapaz de seguir unas normas de convivencia) que van saliendo con cada nueva generación, mejor dejamos de expandirmos y nos centramos en organizar lo que ya hay. Nos dejamos de debates estupidos sobre la lengua en la que son educados, o la asignatura facil que tienen derecho a elegir. El tiempo pasa. El tiempo no arregla los problemas, sólo tiende a amontonarlos. Y a nosotros nos gusta perderlo...
El curso del 63 no me gusta. a) Porque engaña, la severidad del 63 permitía castigos físicos. b) Porque parece decir "los jovenes de ahora son muy malos" (y me imagino una abuela negando con la cabeza), cuando claramente han seleccionado los especímenes para conseguir este resultado. Y c) porque frivoliza un problema real, el de las relaciones entre alumnos adolescentes y sus profesores, o aun más, el de la deficiente educación de nuestro país.
Además, parece que a todos se nos olvida que la educación en el 63 tampoco es que fuera la eduación idílica...
Jajajaja, es cierto que adolece de esos defectos... no se puede considerar un escaparate serio para encontrar una solución al problema. Y tienes razón al apuntar que la educación de esa generación no se puede considerar ejemplar... aunque el debate está abierto, pues se ha pasado de un extremo a otro, de la absoluta represión a la absoluta libertad. No se si será un rasgo del ser humano, o sólo es inherente a la sociedad española, pero nos cuesta encontrar los terminos medios, y cuando llegamos a uno, nos da miedo cambiar, corregir, tiene que suceder algo realmente gordo para que empecemos a tomar medidas de cambio (que por desgracia nos catapultarán irremesiblemente al otro extremo de nuevo). Pero bueno, al menos me divierte el programa, llevo unos pocos años bregando con adolescentes y hay situaciones muy familiares.
Respecto a tu punto b), es cierto que se ha cogido una selección de adolescentes/jovenes muy propia para dar juego al programa. Pero creeme que no son "malos", un poco rebeldes, un poco puñeteros... pero a mi me han llegado a amenazar con rajarme, o con partirme la cara, incluso alguno ha llegado a levantarme la mano... más de un moratón me he llevado al intervenir en alguna pelea y los contendientes al ver que no alcanzaban al oponente han golpeado a quien los separaba. No me quita el sueño, pero tengo compañer@s que si lo han sufrido un poco más (por eso al final era yo el que me pasaba más tiempo con los conflictivos, un marcaje personal).
Y no te hablo de grupos marginales, uno de ellos era un grupo de un barrio obrero normal, como en el que he vivido yo toda mi vida, y otro era un grupo de gente, no rica, pero sí comodamente posicionada. Y aunque estos individuos solo suponian 3 o 4 casos de 50, eran los que más trabajo daban y los que, llegado el momento, podían parar el desarrollo de actividades o incluso animar a otros a boicotear el curso. Y lo que hacen 3 o 4, al final jode a sus compañeros (aunque no se den cuenta) y jode a quienes lo organizan.
Desde mi punto de vista, el problema es muy dificil, solucionable solo si se aborda a varios niveles y con un compromiso real: Una educación más estable sin caracter politico, una educación basada más en valores de convivencia, una educación del entorno del adolescente, una autoridad a la que respetar y acudir, acabar con la sensación de impunidad, del "todo vale".