Mens sana in corpore sano. Juvenal
Llevo unos días jugando al fútbol sala, la verdad es que siempre he sido un poco malo, pero debe ser que todo se pega, y tanto tiempo con gente por encima de la media, ha conseguido que pueda llegar a jugar sin que la gente se descojone, al menos no demasiado.
El problema es que tengo... uhms, estilo propio... demasiado tiempo en Irlanda y demasiados partidos de su fútbol gaélico. Por decirlo de alguna forma, la sutileza no es mi punto fuerte con un balón en los pies o en las manos, me tocó aprender a base de placajes de tipos capaces de engullir medio litro de la espesa guinness local en 4 segundos (y no, no exagero).
Aprovechando mi fuerza, corpulencia y velocidad explosiva, arranco por la banda y el campo se me queda pequeño, el problema es cuando doy con gente a la que eso no intimida, y decide, o bien plantarse delante, o bien plantar su pierna y que pase lo que tenga que pasar. Que suele ser que todos rodamos por el suelo... ya, que podría frenar antes, pero no me suele dar tiempo, siempre confío en que se aparten a tiempo.
Ayer por la mañana me desperté con un agudo dolor clavado en el cuerpo... los músculos lumbares chillaron cuando intenté incorporarme, dejándome tirado. Después de algunos intentos para buscar el movimiento que me hiciera parecerme a un muñeco de plástico, de esos que no giran el torso en ninguna dirección, conseguí sentarme en el borde de la cama... y me dí cuenta de que lo gracioso iba a ser al levantarme... al final no fue gracioso, nada más ponerme en pie, la pierna derecha falló, y casi me "escuerno".
Al ver que no mejoraba, decidí cancelar todos mis planes del día, y dedicarme a descansar... lo único que me aliviaba era dar lastimeros paseos por el pasillo de casa, cuanto más tiempo en movimiento, menos dolor, hasta el punto de creerme capaz de jugar otro partido de fútbol en el momento.
Hoy ya no queda más que un breve dolorcillo, y la advertencia de una amiga fisioterapeuta de que deje de hacer lo que sea que haga y a lo que llamo deporte, durante un par de días al menos, y por supuesto, ni rugby, ni futbol, ni nada de eso hasta el verano. Así que nada, parece que vuelvo a estar como hace un par de meses, con unas cuantas tardes libres por completo... a ver si así me pongo con el proyecto de fin de carrera...
Nos hacemos mayores....los tiempos de chicle, jugando a la pelota después del colegio durante horas pasaron.
El rugby es para animalicos :P
Espero que hoy ya estés mejor
Txao
Jajajaja, pues sí compañero, hace tiempo ya que dejamos de tener 15 años...
Salud!