"Para millones y millones de seres humanos el verdadero infierno es la tierra." Arthur Schopenhauer
El otro día dejaba caer que todo esto se basa en la capacidad de carga. La población humana siempre se ha mantenido dentro de unas constantes. Las enfermedades compensaban la alta natalidad, la explotación de recursos locales limitaba el crecimiento de la población... una especie de equilibrio que se rompió con la revolución industrial, que trajo acceso a medicinas y mejores condiciones tecnológicas para alimentar en masa. Y que hizo que las economías generalmente locales dieran un salto a la globalidad.
Tardamos 10.000 años en pasar de 80 millones a los 1000 millones de humanos a principios del siglo pasado. Sin embargo, hemos tardado tan sólo 100 años en alcanzar los 6600 millones, y la ONU calcula que en 20 años más podremos hablar de 9200 millones. Se puede ver que en la primera etapa (desde la aparición de nuestra raza actual hasta la revolución industrial), el crecimiento es de 0,1 millones por año. En la segunda etapa (de la revolución industrial hasta ahora), el crecimiento medio es de 56 millones por año. Y en la tercera etapa se prevé una tasa de crecimiento de 165 millones de habitantes anuales.
No sin cierta sorna, Albert Bartlett afirma que "la mayor carencia de la raza humana es nuestra falta de habilidad para entender la función exponencial", lo que para nosotros es un crecimiento bajo (un 4% anual, por ejemplo) significa que se duplica la cantidad inicial en apenas 17 o 18 años. Es decir, un país que crece al 4%, como era España hasta la crisis, en 17 o 18 años se ha duplicado.
Dado que el crecimiento economico curiosamente se correlaciona con el crecimiento de consumo energético y el consumo de materias, significa que tan sólo España consume el doble que hace un par de decadas. Hablaban de España como el milagro europeo... ahora que se ha convertido en pesadilla, fijemonos en Brasil, China, India... ¡¡que hablan del 8 o el 10% de crecimiento anual!! Con todos los que son, podrían duplicar su consumo en amenos de una decada. El peligro real no viene tanto por el aumento de población, si no por el aumento de consumo de recursos y el impacto que esto tiene. Oceanos cada vez con menos peces, grandes extensiones de bosques arrasados, lagos de agua dulce desapareciendo...
Explican que la capacidad de carga se calcula en función de variables como "producción de alimento", "producción de energía", "contaminación que se puede emitir sin que sea perjudicial"... es decir, se estudia cual es el límite de recursos que el planeta nos puede dar de forma estable de forma sostenible, sin que lo agotemos por no darle tiempo a regenerar.
Ahora bien, la capacidad de carga es relativa. Miramos el ejemplo de una bolsa del supermercado, podemos cargar 5 uvas sin que se rompa (si se rompiese, es que el supermercado se ahorra dinero en las bolsas), podremos sacar las uvas y meter naranjas, y seguramente la bolsa siga aguantando. Pero, ¿y si metemos 5 sandías? Ni la mejor de las bolsas de supermercado puede aguantar el peso de todas esas sandías juntas.
Pues la tierra es nuestra bolsa, y su capacidad depende del peso de la fruta que podemos meter dentro. O del impacto que provocamos en el planeta en función de nuestro nivel de vida. Un estudio sobre la capacidad de la tierra afirma que, con la producción actual de comida y energía (y eso que ya hemos sobrepasado el límite de la sostenibilidad), podrían vivir 18.000 millones de ruandeses, 15.000 millones de hindúes, tan sólo 2.500 millones de europeos o 1.500 millones de estadounidenses. Claro, los que nos alarmamos con estas cifras somos los occidentales, en Ruanda deben estar pensando que todavía hay espacio para 11 mil millones de personas.
Ya no es un problema de cuanta gente puede vivir... si no de qué calidad de vida estamos dispuestos a aceptar a cambio de que nuestros hijos, o nuestros nietos, tengan un planeta para que ellos puedan vivir.
Mientras el cuidar los recursos del planeta no se vuelvan la excusa perfecta de este siglo para que surgan nuevos totalitarismos (veo que en esta época se manifiestan perfectamente disfrazados con piel de cordero), si es muy necesario tomar en cuenta este tema, en buena parte es cuestión de un cambio de mentalidad en cuanto a ciertas costumbres, ser menos derrochadores y más austeros, pero siempre manteniendo el balance y que el cuidar los recursos no se vuelva una paranoia, a mi la verdad me preocupa esto último.
Un abrazo Träne
También quiero tratar ese tema en otro de los artículos, las posibles connotaciones políticas/poder de todo esto. Pero es que, personalmente, creo que es hora de que cuidar los recursos sea prioridad absoluta. Mañana puede ser demasiado tarde para empezar, y en el supuesto de que tenga hijos, no quiero tener que callar cobardemente si me preguntan "¿Y si lo visteis venir por qué no hicisteis nada?". Es una cuestión de conciencia.
Esto no es como cuidar un jardín. Si hoy no reducimos la captura de peces, varios documentos científicos calculan que en un lapso de entre 10 y 30 años (en función de que documento leas), no habrá peces suficientes para seguir alimentándonos a este ritmo. Y a partir de ese punto se irá reduciendo la cantidad de pesca y muchos caladeros serán irrecuperables... no entro mucho porque también tengo pensado tratar este tema.
También hablaré de totalitarismos porque todo está íntimamente relacionado, pero hoy día, mi voto no vale nada. Nuestro gobierno (o el irlandés, o el portugués...) se ve impelido a aceptar medidas pensadas por grandes bancos. Vivimos en el totalitarismo del mercado. Un totalitarismo engañoso en la medida en que nos provee de unas condiciones de vida aceptables. Pero Europa empieza a temblar desde Reino Unido hasta Grecia...
Es que me tiráis de la lengua :). Tengo pensado tratar muchos de los temas que apuntáis en los comentarios, he leido una docena de libros y visto otros tantos documentales. He batido la red en busca de informes y estudios. Y de una forma u otra, mucha gente va abriendo nuevos hilos que al final relaciona todo.
Un abrazo!
Es que todo está relacionado xD
Pero bueno, ciñendome al tema de hoy, aquí has expuesto claramente por qué no quiero tener hijos. Y también por qué cada vez que oigo a un político (o periodista, o cualquier persona en general) decir que hay que ayudar a la población a tener hijos, me escandalizo. Y de rebote de esto último, también es la razón por la que me escandalizo cuando veo a tanta gente queriendo cortar por lo sano con la inmigración (si es la única solución razonable en los tiempos que corren!)
En el fondo todo es cuestión de conciencia con los que vendrán después. Sean hijos, sean sobrinos, o sean simplemente otros seres humanos.
Un abrazo
De verdad que soy un maldito desgraciao por no responder antes... :P
Tienes razón. El problema es que el crecimiento demográfico es desigual, por un lado apenas crecemos, mientras que por otro no paran de crecer... y como somos tan orgullosos, nos empeñamos en que no se equilibre la balanza (nos hacen falta jovenes, pero cerramos la puerta a jovenes del pais vecino).
La verdad es que generalmente se suele pensar en generaciones venideras, pero nosotros que somos jovenes, seguramente tengamos que vivirlo en primera persona. Hay cifras muy alarmantes para 2030 (algunas mucho antes, pero bueno), eso tampoco nos queda tan lejos... si no somos suficientemente inteligentes para hacerlo por los que vienen, al menos aferremonos al egoismo de hacerlo por nosotros mismos, ¿no?
Un abrazo!