Y una vez, tengo que venir con las orejas gachas... 10 dias sin escribir, tan pancho, y me ha pasado de casi todo. Pero ahora ya nada importa, tenia tantas cosas que contar y se me ha ido totalmente, tantos pensamientos que se han evaporado.
Estoy estudiando, lo que significa que estos dias el espacio-tiempo me juega malas pasadas. Pueden darme las 4 de la tarde sin comer y no darme ni cuenta (por suerte vivo con mi familia y ya me avisan de que hay comida en la mesa), puedo acostarme a las 5 de la mañana y despertarme unas pocas horas despues. Y estoy metido en una burbuja donde todos los problemas quedan más allá de la pared transparente.
Como los dias son largos y yo no soy de los que pueden estar horas y horas sin parar con algunas desagradables asignaturas, aprovecho los ratos de descanso para ir viendo alguna peli a fasciculos (de 20 minutos en 20 minutos), o para escribir un ratejo, o revisar viejos archivos para reordenarlos...
El caso es que hoy he visto Bolt, y no he podido evitar emocionarme un poquitin. Ayer vi la última foto que le eché a mi gato antes de tener que sacrificarle, apenas una bola de pelo que me miraba escondido entre las sabanas, y la pelicula tiene un par de escenas que me han recordado mucho a lo que hacía. Y me ha dado por pensar en sus ultimos momentos, cuando no podia casi caminar y se acercaba medio arrastrandose a donde estaba, me maullaba debilmente para que le hiciera caso, y levantaba un poco la pata, para que metiera mi brazo por debajo de su tripa, me abrazaba el antebrazo con sus 4 patas y lamia mi mano mientras le acariciaba bajo la barbilla.
Me siento estupido, ahora mismo me veo como la persona que tira a la alcantarilla la llave de una celda, y de repente se da cuenta de que está al lado equivocado de la puerta. A la burbuja no puede pasar nada de fuera, pero cojones, tampoco puede salir nada y la pared transparente se empaña, y todo duele un poquito más. Aqui dentro no puede haber dudas, ni un momento de flaqueza, y ha saltado la alarma.
Algo que he aprendido durante estos años, y que es gracias a tener un blog, es que a cada uno le duele lo suyo. No puedo ver a animales sufriendo y sin embargo hay personas que sufren y por las que no derramo una lágrima (si acaso dedico un encendido discurso). Hay gente que llora por sus familiares, y otros a los que la familia les importa menos que un puñado de desconocidos. Gente que llora por un trozo de madera y luego se horrorizan de ayudar a los que son diferentes. Alguna persona que ha querido llorar por si misma por voluntad propia para llegar a otros que lloran y lloraran.
De mi vida han salido muchas personas, gente de la que no he vuelto a saber, algunas que fueron muy importantes, y sin embargo, me afecta más el haber perdido un animalejo peludo. A menudo digo que el ser humano me parece uno de los seres con más motivos para ser extinguido, y el otro día escuché: "El ser humano es el unico animal con predisposición absoluta y voluntaria tanto para el bien más luminoso como para el mal más aterrador", quizás sea lo unico que nos salve, que hace falta tiempo para comprendernos...